Introducción

Emilio Ambasz



FRAGMENTOS
HACIA LA TOTALIDAD




La noción Occidental de las creaciones del hombre como entidades distintas y separadas - en contraste con la Naturaleza - ha agotado su capital intelectual y ético. Un jardín emergente, creado por el hombre, está reemplazando el que nos fue dado originalmente.





Debemos construir nuestra casa en esta Tierra porque no somos bienvenidos en ella. Si la Naturaleza nos hubiese recibido bajo la apariencia en que nos hemos transformado, no tendríamos la necesidad de crear refugios. Todo acto de construcción es un enfrentamiento a la Naturaleza. Debemos concebir una arquitectura que se constituya como la encarnación de un pacto de reconciliación entre la naturaleza y la edificación.

En nuestra búsqueda por dominar la Naturaleza-en su estado original, una segunda naturaleza creada por el hombre ha surgido, intrínsecamente relacionada con la naturaleza-dada. Debemos redefinir la arquitectura como un aspecto de la Naturaleza creada por el hombre, pero para hacerlo, debemos antes redefinir el significado contemporáneo de Naturaleza. Debemos formular una noción atectónica de la arquitectura, en la que la arquitectura es concebida como un componente integral de esta emergente Naturaleza-creada por el hombre, que estamos creando de manera voluntaria pero también involuntaria. La tarea del arquitecto es la de facilitar nuestra naturaleza creada por el hombre hacia la [Naturaleza] orgánica que nos ha sido dada.

Si, como ha sido postulado aquí, la labor del arquitecto es la de crear paz entre la naturaleza-creada por el hombre y la [naturaleza] orgánica que nos ha sido dada. Quizá una nueva academia filosófica es lo que se demanda. ¿Debería tal institución ser nombrada universitas, i.e. la totalidad?

Debemos crear modelos alternativos del futuro, proponiendo una mejor vida que guíe nuestras acciones si no deseamos perpetuar las condiciones del presente. Cualquier proyecto arquitectónico que no pretenda proponer nuevos o mejores modos de existencia carece de ética. Esta labor puede hacer tambalear la imaginación y paralizar la esperanza, pero no podemos sustraernos de este objetivo.


POSDATA

Existe en todos nosotros una profunda necesidad por el ritual, por la ceremonia y la procesión, por vestimentas y gestos mágicos. Es una búsqueda arquetípica en la que todos tenemos participación. Pero tengamos precaución. La desgracia suprema ocurre cuando la Idea llega antes de la Imagen. Las Ideas llegan envueltas en palabras, y las palabras son parte de nuestro bien establecido equipaje lingüístico. Las palabras denotan una tipología que ha sido establecida y culturalmente aceptada, cuando menos, un estereotipo. Como tal, inhiben la introducción de nuevos significados, es decir o i. e. de invención. Las palabras operan en el dominio de la semántica, mientras las imágenes pertenecen al reino de las Visiones.




Fecha de entrevista: 12 de agosto, 2020