Nostrum Habitat: Asia
Entrevista a
Jiat-Hwee Chang
Jiat-Hwee Chang es Doctor en Arquitectura por la Universidad de Berkeley.

Profesor Asociado en el Departamento de Arquitectura de la Universidad Nacional de Singapur. Ha recibido en dos ocasiones el University’s Annual Teaching Excellence Award, y dirige el departamento de investigación sobre historia, teoría y crítica.
Entre sus obras se encuentra A Genealogy of Tropical Architecture: Colonial Networks, Nature and Techscience (2016), galardonada con el International Planning History Society Book Prize (2018). Fue seleccionado en 2017 para el European Association for Southeast Asian Studies Humanities Book Prize. Recientemente ha finalizado Everyday Modernism, junto a Justin Zhuang y el fotógrafo Darren Soh.Es coeditor, junto a William S. W. Lim, de Non West Modernist Past (2011) y de Southeast Asia’s Modern Architecture: Questions in Translation, Epistemology and Power (2019) junto a Imran Tajudeen.
Los dos temas sobre los que investiga actualmente son las historias socioculturales y tecnopolíticas sobre el aire acondicionado y el cambio climático en la zona urbana asiática; y la urbanización transnacional y las historias de las arquitecturas de Asia. En la realización de la primera está colaborando con el STS del ARI (Asia Research Institute dentro del proyecto interdisciplinar “Urban Heat in Asia: Past, Present and Future’’.
J-H Chang, quien tiene un Ph.D. en Arquitectura y Urbanismo de UC Berkeley, es profesor asistente en el Departamento de Arquitectura de la Escuela de Diseño y Medio Ambiente de la Universidad Nacional de Singapur, escribió el libro "Una genealogía de la arquitectura tropical. Redes coloniales, naturaleza y tecnociencia". MONDO NOSTRUM invitó al profesor Chang a una conversación sobre arquitectura tropical que provocará tanto a los estudiantes como a los profesionales de la arquitectura a repensar e inventar manifestaciones arquitectónicas apropiadas en el cinturón tropical del planeta Tierra.
Los dos temas sobre los que investiga actualmente son las historias socioculturales y tecnopolíticas sobre el aire acondicionado y el cambio climático en la zona urbana asiática; y la urbanización transnacional y las historias de las arquitecturas de Asia. En la realización de la primera está colaborando con el STS del ARI (Asia Research Institute dentro del proyecto interdisciplinar “Urban Heat in Asia: Past, Present and Future’’.
J-H Chang, quien tiene un Ph.D. en Arquitectura y Urbanismo de UC Berkeley, es profesor asistente en el Departamento de Arquitectura de la Escuela de Diseño y Medio Ambiente de la Universidad Nacional de Singapur, escribió el libro "Una genealogía de la arquitectura tropical. Redes coloniales, naturaleza y tecnociencia". MONDO NOSTRUM invitó al profesor Chang a una conversación sobre arquitectura tropical que provocará tanto a los estudiantes como a los profesionales de la arquitectura a repensar e inventar manifestaciones arquitectónicas apropiadas en el cinturón tropical del planeta Tierra.
Entrevista por Álvaro Rojas
CONVERSACIONES SORE EL TRÓPICO
Álvaro Rojas (AR) - ¿Los portugueses llegaron a Singapur a principios del siglo 16?
Jiat-Hwee Chang (JHC) - Sí, los portugueses llegaron a Malaca, que hoy en día es Malasia. Malasia y Singapur fueron la misma colonia y el mismo país, pero finalmente nos separamos en el ´65. Técnicamente no está en lo correcto, pero históricamente sí lo está.
AR- ¿Qué tipo de arquitectura o asentamientos, pueblos o aldeas encontraron los europeos en Singapur y la región cuando llegaron por primera vez?
JHC- Los ingleses llegaron a Singapur hasta el año 1819, pero los europeos habían estado en el sureste de Asia desde que los portugueses llegaron en el siglo 16. En ese tiempo, lo que encontraron fue una arquitectura indígena muy común, una arquitectura muy simple, elevada sobre pilotes. Usualmente era de un solo nivel, con cubiertas empinadas y una envoltura porosa, y sospecho que es un tipo de arquitectura indígena que se puede encontrar en muchos lugares dentro de los trópicos. No estoy familiarizado con América Latina. Aun así, cuando veo la arquitectura vernácula de América Latina, hay muchos elementos en común; realmente están diseñados de una forma que es, posiblemente, muy común en los trópicos. Una construcción porosa, liviana y en madera.

AR- Supongo que se podría definir la arquitectura indígena de Singapur y otras áreas de clima húmedo como tropical.
JHC- Sí. Muchos antropólogos han estudiado la arquitectura indígena a través de los años. Algunos dan una explicación funcional, que afirma que está diseñada en respuesta a su entorno. Pero la arquitectura indígena del sureste asiático tiene gran diversidad. Se podría decir que alguna arquitectura indígena no calza bien en nuestro entendimiento de diseño climático. Siempre existe el significado cultural y las dimensiones simbólicas que influencian el diseño de toda arquitectura. Un argumento famoso por Amos Rapoport afirma que no podemos estudiar la arquitectura vernácula solamente a través de la óptica climática o funcional. Debemos estudiarla principalmente como algo modelado por la cultura. Pero, por supuesto, la cultura, el entorno y el clima son muy difíciles de separar, puesto que están completamente interconectados.

AR- Cuando los europeos llegaron al sudeste asiático, ¿cree que aprendieron, o aprovecharon lo que descubrieron en la arquitectura indígena o vernácula?
JHC- Definitivamente. Podemos generalizar y afirmar que sí, en efecto, los europeos aprendieron de la arquitectura indígena vernácula. Pero los europeos son un grupo muy grande. Solo en el sudeste asiático estaban los portugueses, luego los españoles, luego los holandeses y finalmente, por supuesto, los británicos y los franceses. Y estuvieron en la región por 400-500 años. Definitivamente hay largos periodos de la historia en los que los europeos intentaron vivir, comer y vestir como los locales. Luego, también hubo ciertos segmentos de los europeos que intentaron aclimatarse mediante la aculturación por un largo tiempo. Pero también hubo periodos en los que los europeos eran muy conscientes que querían diferirse de los locales, y vivir de forma distinta. Especialmente durante el siglo 19, en el que la noción de raza fue muy importante. Durante ese tiempo, estaban intentando tener una distancia social y cultural entre ellos y la población indígena. También tenían ciertas ideas sobre salud pública, durante la mayoría del siglo 19, y percibían el entorno tropical de una manera negativa. En el amplio espectro de la historia, considero que no es poco razonable decir que los europeos aprendieron de la arquitectura y la cultura indígena. Pero hubo momentos en los que trataron de distinguirse de esta, e imponer su estilo de vida y construcción en el entorno.

AR- Ya ha mencionado que no tiene mucho conocimiento sobre Centro América y los trópicos del Caribe, pero, ¿ve alguna similitud en la arquitectura por colonización entre los trópicos en Singapur y América Central o otras zonas tropicales del planeta?
JHC- Históricamente, sí hay, en realidad, conexiones muy reales, como lo he presentado en mi libro A Genealogy of Tropical Architecture. Los ingleses establecieron colonias en las Indias Occidentales y la región del Caribe desde el siglo 17. En esas regiones, han existido registros sistemáticos de ingenieros militares que intentaban construir de una manera específica para responder al clima en lo que ellos catalogaban como los aspectos insalubres del ambiente tropical. Los primeros cuarteles militares que los ingleses construyeron en clima tropical, de una manera sistémica y a través del uso de componentes pre fabricados, fueron en el Caribe. Eso fue a principios del siglo 19. Más tarde, el modelo influenció la forma en que los británicos diseñaron en la India y otras partes del Imperio Británico. La conexión entre los trópicos del Caribe y los trópicos asiáticos es muy clara.
En términos de la planificación en plantaciones de banano, Frederic Upham, en “The conquest of the tropics” escribe acerca la United Fruit Company en América Central. Menciona claramente que cuando estaban estableciendo estas plantaciones de banano, la United Fruit Company contrató la ayuda de expertos británicos en salud pública que tenían experiencia en la India y en África.
Durante los siglos 19 y 20, las conexiones son muy claras. Lo que es menos evidente, en términos de documentación histórica, es lo que varios escolares – que estudian la arquitectura del Caribe y América del Sur- notan sobre las influencias multiculturales en el elemento arquitectónico regional, conocido como verandah, piazza y galería. Fueron traídos a la región como el resultado de interacciones complejas entre los españoles, británicos y la población local.
No se trata tanto de registros textuales como de evidencias culturales materiales. Cuando observamos la arquitectura y estos elementos arquitectónicos, las similitudes son innegables. Definitivamente existieron conexiones que dieron origen a estas similitudes.
AR- Si nos retrocedemos unos cientos de años antes de la United Fruit Company, talvez mucho más, a mediados del siglo 16, hay varias ciudades que los españoles fundaron en América Latina, como La Habana o Granada. En términos generales, los españoles importaron algunos de los elementos que utilizaban en la construcción en el sur de España, utilizando técnicas como “bahareque” y “adobe”. Muchas de estas casas eran hechas de lodo y techos con teja de arcilla, con aleros cortos, cielos altos y fachadas que eran planas en su mayoría, con aperturas pequeñas. Eso persistió en Costa Rica. Pero es una condición distinta a la que los estadounidenses trajeron a las plantaciones de banano. Parece ser que los estadounidenses entendían el clima y las condiciones mejor que los españoles.
Cuando ha hecho investigación para su libro o cualquier otro artículo o escrito que usted haya producido, respecto a los trópicos y la arquitectura tropical, ¿pudo hacer estudios comparativos de como la arquitectura ha evolucionado en las diferentes zonas de las regiones tropicales?
JHC- Cuando utilizamos la frase “arquitectura tropical”, hacemos referencia a algunos libros publicados entre los años 50s y 60s. Por ejemplo, Maxwell Fry y Jane Drew escribieron el famoso libro Tropical Architecture in Humid Zone (1956). En ese tiempo, se trató de un proyecto poscolonial. Ambos trabajaron en África después de la guerra, y eran consultores de planificación para el gobierno británico en el oeste de África. Estudiaban los trópicos como una región común. No estudiaban territorios independientes, si no más bien los múltiples territorios del Imperio Británico. Cuando hacía la investigación para mi libro, lo que hice fue explorar la historia conectiva. Conectiva para visualizar al Imperio Británico como una totalidad, y como ciertas ideas se movilizaban de una parte hacia otra parte de este. Procuré entender como Singapur fue influenciado por otras partes de los territorios tropicales del Imperio Británico. Durante el periodo colonial, los ingenieros y arquitectos no permanecían en un solo lugar. Se movilizaban a través de las diferentes partes de los trópicos. Por su experiencia diseñando en distintas partes de los territorios tropicales del Imperio Británico, pudieron llevar ideas de un lugar a otro. Las colonias no tenían una autonomía completa. Frecuentemente, cuando se quería construir algo, debían consultar a las oficinas coloniales en Londres. Muy seguido, recibían correspondencia de alguien que les diría “¿Por qué no ven el ejemplo de -por ejemplo- las Indias Occidentales o la India?” o, “¿por qué no ven los ejemplos de Barbados, y lo que hicieron en el pasado?” Durante el periodo que yo estaba estudiando, los siglos 19 y 20, las colonias como Singapur no existían de manera aislada, sino que estaban conectadas. Regionalmente, los británicos observaban lo que los holandeses hacían. Los holandeses tenían un imperio ligeramente diferente. La parte más importante eran las Indias Orientales Holandesas, hoy Indonesia. También se encontraban en el Cabo de Buena Esperanza en el extremo sur de África. Tenían otros territorios menores en otros lugares. Hubo mucho de lo que hoy llamamos un movimiento multicultural de ideas e influencias entre un grupo y otro.

Además, Singapur, y posiblemente hasta cierto punto América Latina, son sociedades migrantes. Tenemos gente que viene del sur de China, India y gente que forma parte de la comunidad indígena. Cuando decimos indígena, nos estamos refiriendo a personas que proceden de la actual Malasia peninsular y las islas de Indonesia. También tenemos comerciantes árabes. En sociedades migrantes es muy común que lo migrantes introduzcan sus propias prácticas a la región. Como usted mencionó anteriormente, los españoles estaban construyendo en adobe y ladrillos de barro en América Latina, lo que pudo no ser muy adecuado, pero de una forma u otra, se adaptaron. Del mismo modo, los chinos trajeron casas del sur de China que no se adaptaban bien al clima local, pero de igual manera, se adaptaron eventualmente.
Hubo mucho de este tipo de interesante fertilización cruzada de ideas que conllevaron a una arquitectura híbrida, y esto es algo que me interesa mucho también. En ese sentido, talvez el sureste asiático es muy similar a América Latina.
AR- Parece ser que los británicos fueron grandes conectores en el desarrollo de la arquitectura tropical, ¿correcto?
JHC- Sí, en la cúspide del Imperio Británico, a finales del siglo 19 y principios del siglo 20, controlaban un cuarto del territorio mundial, y también, un cuarto de la población mundial.
AR- ¡Sorprendente! Claro, ahora todo me hace sentido.
Mi familia emigró a los Estados Unidos a principios de los años 60s, por lo que completé la mayoría de mi educación y estudié arquitectura en Nueva York.
Mis primeras experiencias diseñando proyectos en Costa Rica estuvieron altamente influenciadas por las ideas a las que fui expuesto en la escuela e Nueva York. Mi primera casa, que construí en 1976, era una casa blanca. Hice varios intentos para proveer protección y sombra, pero muy pronto, la casa está llena de moho. Me inquieté mucho por esta situación, y con la cuestión de encontrar una respuesta a las realidades de un ambiente local. Empecé a diseñar proyectos en los que intentaba proteger las paredes exteriores. Aperturas y aleros extensos, empecé a teorizar sobre eso, sobre como la arquitectura en los trópicos, en mis trópicos, debía expresarse.
¿Qué piensa sobre la expresión arquitectónica? ¿Qué les diría a estudiantes en zonas tropicales sobre los elementos arquitectónicos formales, el aspecto, la estética de casa, edificios, que podría transmitir un mensaje claro que afirme que es arquitectura tropical?
JHC- Su experiencia es algo que es muy común en muchos de los arquitectos mayores de Singapur. La primera escuela de arquitectura en Singapur se estableció hasta finales de los años 50. Antes de esto, los estudiantes locales debían ir al extranjero. Muchos de ellos iban a Inglaterra, puesto que éramos una colonia inglesa. Otros pocos iban a Australia. Una historia familiar que es contada por muchos de ellos es que no les enseñaron a diseñar para el clima tropical. Como podrá imaginarse, durante los años 50, existía menos literatura sobre arquitectura en Asia o América Latina. Aprendían a mantener las casas calientes, puesto que el clima frío es el problema en esos lugares, no el clima cálido. Al regresar a Singapur, debían ajustarse y aprender a diseñar para los trópicos. La primer gran conferencia sobre arquitectura tropical fue organizada en 1953. En ese tiempo, un estudiante nigeriano en Manchester se dio cuenta de que no estaba aprendiendo a diseñar para África. Encontró a Otto Koenigsberger, quien tenía muchos años de experiencia diseñando en la India, y le dijo, “No me están enseñando a diseñar para el clima africano, ¿que haré cuando regrese allí?” Entonces, Koenigsberger le contestó, “¿porqué no organiza una conferencia entonces?” Fue a partir de esta conferencia que Koenigsberger fundó un departamento de arquitectura tropical. Se dieron cuenta que tenían muchos estudiantes de antiguas colonias, o, en ese tiempo, colonias en proceso de descolonización, que se encontraban estudiando en Inglaterra debido a la escasez de escuelas de arquitectura en los trópicos. No les estaban enseñando nada acerca de como construir en su tierra natal.
La otra situación es que muchos arquitectos del sureste asiático han estado, y aún están, interesados en la discusión sobre como diseñar en los trópicos. Muchos de ellos conocen los tecnicismos de como diseñar en clima tropical, especialmente cuando el enfoque en la sostenibilidad ha enfatizado la importancia de diseños climáticos apropiados. Creo que también están interesados en la cuestión estética del diseño para los trópicos. Tay Kheng Soon, un reconocido arquitecto singapurense, expresó estas tres palabras que encapsulan en su opinión, la estética tropical: línea, borde y sombra. Estaba respondiendo a la obsesión modernista con el plano, el volumen y la luz. Le Corbusier mencionaba como la arquitectura es la interacción de geometría platónica bajo la luz. Arquitectos diferentes en tiempos diferentes tienen a pensar sobre esta cuestión de una estética para los trópicos de una manera distinta. Algunos arquitectos veían la arquitectura indígena y luego intentaban aprender de esta. Hay un número de arquitectos que, desde los años 80 han estado intentando articular la estética de la arquitectura tropical de la región.
AR- Nuestra primera escuela de arquitectura abrió en 1971; antes de eso, todos nos graduamos en el extranjero. Antes de que esta escuela abriera, la mayoría de nuestros arquitectos iban a estudiar a México. Otros pocos iban a escuelas en Estados Unidos o América del Sur, Chile, probablemente, Brasil. Pero muy pronto, más escuelas empezaron a abrir en Costa Rica.
¿Cómo se imagina que deberían ser diseñados los rasca cielos en los trópicos? ¿Cómo deberíamos abordar el diseño de edificios de gran altura, o incluso media altura, en nuestra área?
JHC- Esta es una pregunta a la que muchas ciudades asiáticas se enfrentan, y estas ciudades, probablemente como otras ciudades latinoamericanas, son muy densas. Además de Ken Yeang, existe una historia en intentar construir rascacielos tropicales. En Singapur, el 80% de la población vivimos en vivienda pública, y desde los años 60 la vivienda pública siempre ha sido de altura. Cada edificio era de 12 pisos de altura, hoy en día, la vivienda pública comúnmente es de entre 30 a 40 pisos de altura. Las estrategias de diseño adoptadas en el pasado eran bastante básicas y modestas. Lo que hacían era orientar los edificios de manera correcta, con las fachadas largas del edificio orientadas en dirección norte-sur, y no este-oeste, y también manteniendo una sección con poca profundidad para facilitar la ventilación cruzada. Esas eran las técnicas básicas, pero desde entonces, con Ken Yeang y luego WHOA, y el interés en tener vegetación tropical, ha habido innovaciones diferentes. Hay muchos arquitectos jóvenes que han estado produciendo proyectos muy interesantes en las últimas dos décadas. Uno de estos es WOHA. Ellos han intentado reinterpretar los rascacielos, y han desarrollado estrategias distintas a las de Ken Yeang y Tay Kheng Soon. Han construido bastante en la región, incluyendo Singapur, Malasia, Tailandia, India y China. Repiensan los aspectos volumétricos de los rascacielos en relación con el clima, y han introducido ciertos tipos de articulaciones verticales de espacios verdes en el cielo en un entorno de alta densidad. Uno de los mayores problemas al que nos enfrentamos en muchas ciudades asiáticas en los trópicos es la congestión vial, el ruido y la contaminación del aire. En las técnicas tradicionales de diseño en los trópicos, si se quiere ventilar, uno solamente abre ventanas. Pero, hoy en día, cuando se abre una ventana en una de estas ciudades, no solo entra la brisa, sino también el ruido, el polvo y el aire contaminado. Algunos de los métodos más antiguos para diseñar en el clima tropical ya no resultan prácticos en una ciudad contaminada y ruidosa. Estos nuevos retos a los que nos enfrentamos deben ser abordados no solamente desde la arquitectura. Dependen en una mejor planificación, mayor provisión de transporte público, o una mejor zonificación de uso mixto para minimizar la necesidad de viajar. Lo que WOHA busca abordar a nivel arquitectónico, por ejemplo, es la creación de un nuevo nivel de suelo, elevado y con vegetación. Esencialmente, esto es para intentar aislar el edificio del plano base y la calle ruidosa.

AR- ¿No cree que se debería desarrollar un cuerpo de pensamiento crítico y teórico de la arquitectura en los trópicos y, de hecho, para cada tipología arquitectónica? ¿Es esto factible? ¿Sabe si hay personas dedicadas a esto?
JHC- A través de los años ha habido un número de arquitectos globales que lo han intentado. De hecho, mi conocimiento de Costa Rica viene de un libro que leí acerca de Bruno Stagno, editado por Bruno Stagno, Alexander Tzonis y Liane Lefaivre.
Cuando un colega y yo editábamos una sección temática de la revista ABE (Architecture Beyond Europe) sobre “Enredos de la arquitectura y el confort más allá de la zona temperada”, nos dimos cuenta de que lo que conocíamos de Costa Rica era primordialmente por ese libro. Supongo que eso se debe en parte a que el mundo a veces está dividido en distintas esferas lingüísticas. El conocimiento producido en América Latina, me imagino, existe principalmente en el idioma español, al que el resto del mundo quizás no puede acceder. Pero pienso que, para bien o para mal, el mundo hoy en día es dominado por el idioma anglófono. A veces se puede deber a que hay mucha influencia de los Estados Unidos, y es posible que ellos no hagan las cosas de la mejor manera, menos bajo Donald Trump. Pero el inglés se esta convirtiendo en el nuevo idioma global que, de alguna manera, conecta diferentes partes del mundo. No creo que históricamente haya habido algún momento en que un porcentaje tan alto de la población mundial compartiera una lengua común. Algunas personas no serán muy proficientes en el inglés porque no es su lengua materna, pero, al menos, muchas personas tienen el inglés como un segundo idioma en la mayor parte del mundo. Entonces, la posibilidad de un discurso común podría aumentar.
Fecha de entrevista: 18 de agosto, 2020